Se trata de un material que posee la capacidad de retener el agua en un porcentaje equivalente a miles de veces su peso. Por esta causa se emplea para la hidratación de la epidermis ya que reconstituye las fibras que sostienen los tejidos de la piel dándole una mejor forma.

Permite corregir pequeñas asimetrías, perfilando o dando volumen, consiguiendo con la corrección un resultado natural.

El ácido hialurónico es seguro, biodegradable y consigue muy buenos resultados estéticos.